La exclusión, la desigualdad y la discriminación son modos de establecer vínculos sociales, presentes en las relaciones de género, con el medio ambiente, con los indígenas, con los ancianos y con todo aquel que se llame otro como el significado de oposición a la racionalidad del sujeto dominante en una estructura de poder patriarcal. La forma de construir relaciones de desigualdad parte del argumento falaz que sostiene la existencia de seres humanos de primera y de segunda, unos tienen voz y derecho por la esencia de su humanidad; los otros son inferiores: por el color de su piel, por los simbolismos de su cultura, por los genes de su raza, por las prácticas de placer en su sexualidad, por los dioses y ritos de su religión, por la dinámica de sus enfermedades, por defender sus ideas y por la invención de sus sueños.

Detalles