Madrid, 1748. Jorge Juan ha regresado de las Indias, donde ha medido el arco del meridiano demostrando que la Tierra está achatada por los polos, pero la Inquisición no ve con buenos ojos algunas afirmaciones del ilustre marino y se opone a que publique la obra que contiene sus estudios y observaciones. El espía del rey nos lleva por las calles del Madrid de Fernando VI, por el Cádiz de la poderosa burguesía que se ha hecho con el comercio de Indias o por el Londres de la Royal Society. Calvo Poyato ha construido una novela en la que ilustrados y partidarios de la tradición sostiene una fuerte pugna. En ese ambiente histórico, la intriga y el espionaje atrapan al lector desde las primeras páginas.