La envidia, el incesto, la rebeldía, la arrogancia, la voluntad del hombre y sus límites, el parricidio o los celos se encuentran entre los temas abordados por Sófocles, Eurípides y Esquilo, los tres más grandes dramaturgos de la Grecia clásica. Los personajes representan a quienes violentan el orden natural del Universo, según la visión griega, y el castigo que reciben por su falta. Durante la antigüedad clásica, el teatro era uno de los medios para educar a la gente acerca de los dioses, de la moral, de la política y de las costumbres que se debían seguir para mantener en armonía el curso de los acontecimientos. Las historias que te ofrecemos fueron creadas para entretener al público y para enseñarles que sus actos tienen consecuencias.