La filosofía no se identifica con las ciencias especiales ni se limita a un terreno. Es una ciencia universal. Se distingue de las otras disciplinas por su método y por su objeto formal o punto de vista. Por su método, porque quien hace filosofía no está obligado a plegarse a un solo camino del conocer. Y por el punto de vista, porque cuando considera un objeto, lo mira siempre desde el límite de sus aspectos fundamentales. La filosofía es la ciencia de los fundamentos. Como dice Bochenski, "donde las otras ciencias se paran, donde ellas no preguntan y dan mil cosas por supuestas, allí empieza a preguntar el filósofo". La filosofía del derecho presenta en común con la filosofía en general la naturaleza fundamental de su problemática; la primera tiene un papel de mediadora entre ese sector de la actividad humana que es el derecho y la interpretación general de la vida del hombre. El objetivo de este ensayo es introducir al lector en el fenómeno jurídico desde una perspectiva filosófica, abordando los principales problemas teóricos del derecho y las soluciones que a esas cuestiones dan las tres principales corrientes filosófico-jurídicas de la actualidad: iuspositivismo, iusnaturalismo y marxismo. El autor propone, además, una visión del derecho desde lo que denomina iusnaturalismo histórico. No constituye un tratado de filosofía del derecho, sino un preámbulo que pretende servir de ayuda en la formación de aquellos que se inician en el tema.