El Dr. Mariano José Morales Amelia decidió aceptar la vorágine de compatibilizar su trabajo diario con la preparación de una tesis doctoral. Como terna de la tesis escogió el estudio de las células, más específicamente del ADN de las mismas. No solo aceptó el reto, sino que consiguió después de años de esfuerzo obtener como calificación en la defensa de la misma un sobresaliente curo laude. A partir de este momento ya no pudo desprenderse del "gusanillo" de la investigación. Ha conocido y asimilado bien el método científico, lo sabe aplicar con rigor y lo demuestra en su trabajo clínico. Sus colegas lo reconocen y valoran y comienza a dar conferencias y a publicar trabajos.