En esta Obra, Otto Rahn se embarca en un viaje mágico y misterioso al Lánguedoc, tierra de los valerosos Cátaros, en Francia y luego por Alemania, Austria e Islandia, siguiendo las pistas para comprender el trovar clus de los herejes paganos y su tesoro, el Graal, la piedra cáida de la Corona de Lucifer, a quién no se hizo justicia, contactando en esta travesía con actores relacionados de una u otra manera con aquellos legendarios trovadores, héroes, amantes y guerreros que predicaron un cristianismo pagano plagado de gestas de caballería y romance; Rahn narra esa otra historia perdida, mostrando al lector una visión llena de símbolos prohibidos y de afirmaciones insospechadas y terribles; nos señala a algunos de aquellos hombres y mujeres que según el autor, han tenido el HONOR de considerarse cortesanos de LUZBEL, que habría sido el Señor de la Belleza y el Valor Absolutos, y no una faz de Satán, como se suele creer ahora; Así mismo su obra está impregnada de aquel paganismo místico, heroico, que gesto la gran rebelión que sus fieles seguidores empeñaron en contra de la Sinagoga de Satanás el gran engañador, el creador demiurgo conocido hoy como dios de los judíos. Es muy posible que Rahn aportara algunas de las claves que hicieron de Alemania Nazi la nueva portadora de la luz del Graal, después de 700 años del más terrible oscurantismo, cuando en Beziers, Carcasona y Tolosa ardieron las hogueras de la inquisición para castigar a quienes habían osado desafiar a las potencias de la materia.