La moral que predica Samaniego es "Utilitaria", una especie de recetario "práctico" para la vida. Por eso denuncia continuamente la ingratitud, los falsos amigos, la adulación, la hipocresía, los prejuicios aceptados sin crítica, la traición, la venganza, la violencia del poderoso y la indefensión del débil. Sin duda hay moralejas que nos vienen grandes, o nos resbalan, o nos resultan repelentes.