Un país dramáticamente desigual, de pobreza arraigada e incrementa, políticamente inocuo y disfuncional, por ende, explosivamente conflictivo, remite a un estado debilitado, afectado por una crisis sistemática y en franca descomposición. el gobierno de Calderón ha sido participe activo de esa condición y sus resultados deficitarios. ese es el horizonte que aguarda al nuevo gobierno al desempeño y el ensueño esperanzador de todo nuevo ciclo. ¿Como interpretar el bajísimo crecimiento económico? ¿la recomposicion o prevalencia de estructuras autoritarias?, ¿la lacerante desigualdad social? ¿como situar su estrategia precipitada y tozuda contra el narcotráfico, el horror de la mortandad, los desaparecidos y los desplazados? estos fueron elementos sintomáticos y evidentes de la acción del gobierno, claves para interpretación.