La literatura ha dado al mundo tres personajes que son esencia de lo universal y humano: Don Quijote, Don Juan y Hamlet. De estos Hamlet es el más dificil de encasillar en una norma de conducta. Afirmar que Hamlet es, simplemente la expresión de la duda, .de la no acción, es ignorar los resortes que han hecho de él un ovillo de infinidad de aristas que resisten cualquier clase de análisis. Tanto el profano como el filósofo, el crítico corno el médico, encuentran en él significaciones que no hacen sino enriquecer la multiplicidad de sus valores.

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