¿Qué tal si el liderazgo no se construye sobre la verticalidad del mando ni reposa en los hombros de un individuo, mortal como todos, al que llamamos jefe? ¿Existe un sistema distinto a la jerarquía para conducir a las organizaciones hacia niveles superiores de eficiencia? ¿Qué pasaría si todo el equipo articula el liderazgo como una red de relaciones donde quien dirige facilita la organización y colaboración colectiva, y crea, de paso, disfrute, realización y bienestar para todos? Muy lejos de una quimera, los especialistas en gestión organizacional Ignacio Fernández y Rodrigo Zambrano, revisitan el paradigma tradicional del líder y crean un método para alcanzar lo que denominan Liderazgo Efectivo para el Alto Desempeño (LEAD), concebido como un "ser con un alma colectiva", inspirado en energías arquetípicas y relaciones no jerárquicas. Mediante la identificación y desarrollo de 13 competencias clave para emprender esta nueva concepción, proponen reemplazar la figura del jefe tóxico y maltratador por uno que evoluciona su ser, y transforma el ámbito del trabajo en un lugar de encuentro y despliegue personal y colectivo. Los autores anuncian que el derribamiento de los antiguos tótems ha comenzado, y que el tiempo de las decisiones compartidas, que brotan de las interacciones del equipo, abre inmensas posibilidades.