"Este extraordinario libro se une al reconocimiento que el Arte Latinoamericano ha conquistado décadas recientes como un género importante que ha enriquecido el Arte Universal en el siglo XX. Hasta entonces, sus referencias habían ocupado un segundo plano en el discurso académico. La expresividad del arte primitivo que advirtió Picasso a principios del Siglo XX provocó un nota cambio que impulsó el desarrollo de un sinnúmero de movimientos conocidos como el Vanguardista Europeo. En el caso de America Latina la expresión arcaica logró mantenerse latente durante el periodo virreinal, como una semilla que germinó motivada por la libertad que promovían las vanguardias europeas volcándose en un arte poderoso, rebosante en elementos y con visualidad propia. El impresionismo, las tendencias de entreguerras y mas tarde las propuestas sugeridas desde Nueva York, han tenido un impacto en el Arte Latinoamericano del siglo XX. Los artistas locales tomaron lo estructural y lo enriquecieron con sus propias voces. El único movimiento considerado autónomo y universal fue el Muralismo, que México exportó al mundo entero como un arte "