La era de la información trae aparejado el cuestionamiento sobre el diseño de entornos educativos como catalizadores del aprendizaje, por lo que es necesario replantearse la función del conocimiento dentro de nuestras sociedades. La educación superior está requiriendo nuevos espacios que superen la mecanización de la educación y su institucionalización en rituales descontextualizados, recuperando el vínculo entre las prácticas sociales y las configuraciones espaciales, en la búsqueda de un marco de interpretación reconstructiva del territorio. Los trabajos que se presentan abordan los cambios referidos y se inscriben dentro de una perspectiva interdisciplinaria y binacional (Francia y México). Mediante un rico arsenal teórico y metodológico, la presente obra logra descifrar los elementos no visibles e implícitos de las experiencias y percepciones de los sujetos en el espacio. A partir de esta información, se construyen categorías que permiten inferir los valores y modelos subyacentes a las soluciones arquitectónicas, recuperando así el concepto de dispositivo como la construcción conceptual que organiza los instrumentos que favorecen la enseñanza.