Las regiones turísticas costeras son polos fundamentales de la integración global de México, ya que representan altos ingresos de turistas y divisas internacionales. La importancia económica de estas regiones ha tenido repercusiones en las altas tasas de crecimiento demográfico de sus áreas urbanas, donde sobresalen casos como el de Cancún y Puerto Vallarta que superaron a grandes áreas metropolitanas como México, Guadalajara y Monterrey. La presente obra se enfoca en el análisis de la región urbana turística costera, ubicada en los municipios de Puerto Vallarta, Jalisco y Bahía de Banderas, Nayarit, la cual, a pesar de su escasa población, es de importancia clave como destino turístico nacional por la llegada de turistas nacionales e internacionales. A pesar de esto, son evidentes los procesos de destrucción de los recursos ambientales y paisajísticos del territorio, así como las diferencias socioespaciales de las zonas de los turistas y la de los residentes, donde conviven en un mismo territorio la miseria y la opulencia. En los capítulos que integran el libro se analizan, desde distintos enfoques, los procesos clave que han dado lugar a la transformación del territorio en torno a la Bahía de Banderas como una estructura policéntrica y a su configuración espacial como región urbana turística costera.