La enfermedad tromboembólica venosa es una de las principales causas de muerte en los países desarrollados, causando más muertes que el síndrome de inmunodeficiencia adquirida, el cáncer de mama y los accidentes de tráfico en conjunto. Esta enfermedad, que incluye a la trombosis venosa profunda y al embolismo pulmonar, puede presentar síntomas no específicos y manifestarse inicialmente por embolismo pulmonar grave. Ante este problema, se han desarrollado métodos que valoran el riesgo de los enfermos y recomendaciones basadas en evidencia para la profilaxis de acuerdo al riesgo de esta entidad.