Las páginas de Roja, están llenas de furia, depravación, impulsividad, perversión y, sobretodo, desnudez (de seres humanos comunes y corrientes). Se incluyen situaciones y comentarios ofensivos, denigrantes y/o discriminatorios. La sintaxis y las estructuras narrativas no son siempre sencillas ni de fácil comprensión. Predominan la ironía, el doble sentido y el lenguaje soez. En general, los cuentos presentan temas, escenas, atmósferas, [instintos,] imágenes y circunstancias en las que reinan la violencia psicológica, física, sexual y sintáctica, lo cual, en consecuencia, los vuelve inapropiados para menores de edad y para personas de criterio chiquito (santurrones, gazmoños, mojigatos, cínicos, políticos, asesinos, valemadristas, hípster, estúpidos, postmodernos, imbéciles, postmodernos, ignaros, académicos, defensores de los derechos humanos [y de los animales], agrónomos, izquierdistas, derechistas, centristas, pancistas, pacifistas, belicistas, nacionalistas, fundamentalistas, ateos, religiosos, agnósticos, sádicos, masoquistas, coprófagos, críticos, literarios, coprofílicos, escritores, estreñidos, editores, putas y un enorme etcétera).