Las tapas no son solo un tipo de comida, sino una manera de socializar, de encontrarnos con amigos, de charlar mientras picotearnos alguna cosa, a veces hasta con desconocidos. Las tapas ayudan a consolidar las relaciones humanas. Cuando nos sentarnos a una mesa o nos ponernos delante de la barra de un bar con unas patatas bravas, un buen trozo de tortilla o un plato de chipirones, con una cerveza, una copa de vino o un refresco, el tiempo parece detenerse. Aprovechamos para hablar de fútbol, política, amor, amistad, y en ocasiones incluso creernos que podemos arreglar el mundo con una copa y u" plato. Las tapas forman parte de una tradición, de nuestra cultura. Este libro recoge esa tradición y esa cultura y propone recetas españolas que nos han acompañado toda la vida. Delfina Palacín estuvo al frente de la cocina de un conocido bar durante cuatro décadas. Sus tapas fueron muy populares en toda la comarca y, con el tiempo, su bar se convirtió en una parada obligada también para gente de todas partes.