Elle y su padre se mudan a una casa frente a un orfanato en ruinas, el Instituto Thornhill. Desde su habitación, Elle ve a una niña en la ventana y quiere ser su amiga. Esto la lleva a desentrañar el oscuro pasado de Thornhill y a descubrir que mucho tiempo antes ahí vivía Mary, una chica que al ser violentada por sus compañeras planea vengarse y sus acciones tienen consecuencias desastrosas. Poco a poco, las historias de Elle y Mary se entrelazan; así la autora muestra cómo las relaciones humanas plantean profundas paradojas.