Seria presunción mía tratar de eludir una fracci6n de las maravillas contenidas en las Escrituras Sagradas de los Eternos Vedas, en las cuales, aunque transformáramos en papel todos los árboles y plantas del universo, y tornáramos en tintas las aguas de los océanos, así mismo, no serían suficientes para escribir al respecto de la grandeza, maravilla y gloria del Todo poderoso y su Creación cómo una mina del más puro oro puede no ser encontrada en la superficie, sus venas más ricas solamente premiaran a aquellos que tuvieran la paciencia de cargar durante arios la lámpara de la fe. No importa que a veces haya oscuridad, conserven firmemente la llama de acceso a la verdad hasta que de alguna forma o de algún lugar, por la gracia de algún grande Gurú o Maestro, nuestra llama interior nos conduzca hacia arriba hasta el creador mismo, lo que es revelado a algunos y ocultado a otros.