Profundamente enraizada en lo popular, la obra de Federico García Lorca ha mantenido su vigencia y encanto a lo largo de varias generaciones de lectores. Su inventiva metafórica, su capacidad de sugerencia, su hondura y compromiso con las palabras no ha tenido igual en la poesía contemporánea. Por eso, leer al genial poeta granadino se convierte siempre en un deslumbramiento y una epifanía. La presente selección ha optado por la cuerda más popular y tradicional de la obra de Lorca, aquella que ha obtenido tal vez un eco más perdurable: la de las canciones y los romances (Poema del cante jondo, Romancero gitano), sin excluir los recogidos en sus obras teatrales, junto a piezas singulares como el “Llanto por la muerte de Ignacio Sánchez Mejías”. En ellos está la esencia de una poesía que supo como pocas nombrar la sustancia terrible y honda del misterio.