La novela que ocupa las páginas de este libro, Las uvas de la ira, ganadora del premio Pulitzer, no sólo es la obra maestra de John Steinibeck, sino una de las novelas cumbre de la literatura norteamericana. En el contexto de esta historia se dibujan tres grandes tragedias que dieron lugar a una verdadera convulsión en la sociedad de los Estados Unidos y que produjeron un doloroso despertar del American dream. Las dos tragedias más evidentes fueron el colapso económico que dio lugar a la Gran Depresión, y el fenómeno llamado Dust Bowl , que se podría traducir como “tazón de polvo”, con lo que se generalizo la pobreza en un país donde la gente había aprendido a no pensar en ella. Como algunas otras obra de la literatura universal, Las uvas de la ira es una novela grande y trascendente, en principio porque es compasiva y comprensiva con lo humano, pero también porque es iconoclasta, pues rompe con esa clase de ideas que se adoran como ídolos y disipa las brumas de la mitología social, trayendo a la conciencia del lector individual una realidad que, con todo y su crudeza, produce un efecto luminoso y en el fondo optimista, pues se nos revela la condición humana como dotada de un espíritu poderoso y trascendente, capaz de elevarse por encima de la adversidad.