Doscientos años después de que los planetas hayan sido colonizados por el hombre y cuando los nuevos habitantes de la Luna se consideran independientes, la guerra entre la Tierra y la Federación, la unión de colonias del sistema solar encabezadas por Venus y Marte, parece inminente. Para evitarla, Bertram Sadler será reclutado como agente de contraespionaje para desenmascarar al miembro de un observatorio astronómico en la Luna que presumiblemente está pasando información a la Federación. Emocionante cruce entre novela de ciencia ficción y espionaje, Claro de tierra narra una aventura estremecedora, en la que no faltan ni los característicos rasgos de humor del autor ni unos personajes perfectamente trazados. Clarke decidió escribir esta novela en 1941, mientras contemplaba atónito los humeantes escombros del East End londinense bombardeado. Entonces imaginó «otra guerra», cuyo marco fuera la Luna. El New World Science Fíction describía esta novela del siguiente modo: «A la manera del gran Wells, esta es la mejor descripción de una batalla espacial que hemos leído nunca». Aún no ha sido superada.