"En suma, podemos afirmar que en la década de los años setenta del siglo XX se inició la crisis y decadencia de la política indigenista de América Latina, que proponía la integración de los pueblos indígenas al conjunto de la sociedad, en detrimento de sus lenguas, historias, valores y su propia visión del mundo. Como protagonista y acompañante del movimiento indígena de México y de América Latina, quiero dejar testimonio de mis reflexiones y propuestas surgidas del largo proceso del movimiento indígena de nuestro país, a través de los ensayos que se reúnen en esta obra que denomino Del indigenismo al humanismo. Es así que, en el presente libro, propongo que la política del estado mexicano para la atención a los pueblos indígenas, debe trascender hacia el humanismo, en el entendido de que hay que refundar la nación de este siglo, recuperando nuestro legado civilizatorio mesoamericano que fue soslayado desde la Colonia hasta nuestros días."