Todos los niños son únicos y especiales; pero uno de los más sorprendentes es Diego, que vive dentro de una botella, completamente aislado de la realidad. Al principio nadie lo notaba, pero conforme fue creciendo, su familia se percató de su peculiar condición y las dificultades para tratar con él. Diego es autista. Esta no es una historia acerca de la enfermedad sino sobre la tolerancia, el diálogo y la unión familiar, que será el único remedio para que Diego intente dejar su mundo para comunicarse con los demás. La familia agotará todos los recursos para ayudarlo, incluso, pedirá la ayuda de una prestigiosa especialista en curar todo tipo de males que tuvieran que ver con encierros. ¿Diego logrará salir?