Helena Terreros, agente de la policía especializada en la investigación de delitos contra la mujer, encara uno de sus casos más difíciles: la desaparición de niñas y adolescentes. Todas tienen en común ser hijas de trabajadoras de maquila, viven en colonias de interés social y quedan al cuidado de algún familiar mientras las madres acuden a las fábricas. La más reciente es Paloma, una preadolescente que desaparece de su propia casa mientras su madre cumple con el doble turno laboral. Apoyada por Demetrio, periodista investigador, Helena comienza una frenética carrera contra el tiempo en busca de la niña. A la par de la investigación del caso «Paloma» y los otros casos de desaparición y asesinato, Helena enfrenta una lucha personal y solitaria con su propio pasado que la empuja a indagar estos delitos. La cicatriz en forma de flor sobre su pecho habla de un pasado que se remonta a su primera infancia y del que solo tiene recuerdos fragmentados, pero que le heló la sangre para siempre. Sin importar que viva en el desierto más ardiente, se ha ganado los apodos de «La Princesa de Hielo» y, más de acuerdo con su propia historia, El Halcón Blanco. En esta compleja novela, Salud Ochoa hace una radiografía del deshilachado tejido social en nuestro país y del entramado que se le sobrepone para obstaculizar las posibilidades de paz y justicia. Mientras la lista de sospechosos directos se acorta, la de implicados se amplía.