Después de haber tocado la batería de una banda de metal con la sangre llena de venganza en Hecatepec, Samuel Segura sigue los pasos de doce bestias acompasadas por una especie de blues ahogado en whisky. Los protagonistas de sus páginas rompen los lineamientos de la eternidad y encuentran, por las malas, sus ciclos para comenzar o finalizar sus determinaciones en un mundo hostil. Luis Miguel moribundo a mitad de un concierto, una abuela reencarnada en gato, una ladrona de libros cancelando una cita con su ex, un asaltante y profesor de prepa, un albañil en deuda con el diablo... personajes relegados a sus contextos, sin posibilidad alguna de moldear el "después", con los deseos desencadenados por la miseria, el abandono o la carencia. No obstante, calificarlo como un libro perseguido por esas condiciones no haría justicia al reencuentro de cada una de esas figuras con las personas que en el fondo somos nosotros mismos, los lectores: ansiosos de amor y de reconocimiento del otro.Los cuentos de ¡Horda! y otros relatos, toman nuestro ser incompleto para narrar la Intimidad del sufrimiento del otro. El compañero de asiento en la combi, la escuela o la propia casa devora los ojos del espectador para adentrarlo en las vísceras del dolor silenciado; es decir, la cotidianidad propia, poco asombrosa para nuestras miradas, pero que no por ello deja de ser un moribundo convulsionándose en la banqueta al que pasamos de largo con desdén.La Colección Extra(e)ditados reúne a los mejores escritores jóvenes de distintas latitudes de México, que escriben para lectores jóvenes. Es una invitación a leer sin límite de tiempo en donde el desafío es pelear a la contra.