Este libro incluye ochenta minificciones, pequeñas historias cargadas de simbolismos, anécdotas, fantasías, magia, muerte, humor negro, frustración, ternura. Son el reflejo de las obsesiones de Berta Carrillo, autora que debuta así en el panorama de la literatura breve mexicana, con toda su pasión y su empeño. Los personajes de Toda una vida son de lo más cotidianos, pero en situaciones tan reales que parecen inventadas, porque los episodios tragicómicos de la gente común son tan inverosímiles como hilarantes. Una excelente opción para cualquier tipo de lectores, en especial para los que gustan de aventurarse en nuevas rutas narrativas.