En estos momentos el lector se estará preguntando ¿qué son las Matemáticas Discretas?, pero a menos de que haya cursado dicha asignatura, difícilmente podrá contestar esta pregunta de forma correcta. Lo inquietante no es el término matemáticas, sino “discretas”. De manera coloquial, alguien discreto es aquella persona que tiene reserva o prudencia. Primero definiremos qué son las matemáticas. Para tal fin nos hemos basado en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española que la define como “la ciencia deductiva que estudia las propiedades de los entes abstractos, como números, figuras geométricas o símbolos y sus relaciones”. Ahora, para darnos una idea más clara del concepto “discreto” hay que considerar que todo fenómeno que ocurre en la naturaleza puede ser clasificado como uno de dos fenómenos: continuo o discreto. Para entender la diferencia entre ambos conceptos consideremos el siguiente ejemplo: Un fenómeno común, para la mayoría de nosotros, es manejar un automóvil. Resulta que en este acto se presentan los dos tipos de fenómenos. El continuo ocurre conforme se va incrementando la velocidad, pues se inicia en cero y se acelera paulatinamente hasta alcanzar una velocidad máxima. Desde esta perspectiva hay una infinidad de velocidades entre el valor inicial y el máximo; es decir, es posible tomar cualquier valor dentro de un rango previamente establecido y esto de una forma gradual. El discreto ocurre cuando se cambian las velocidades, pues únicamente se tiene una determinada cantidad de velocidades y solo se puede estar en una de ellas; es decir, primera, segunda, tercera, cuarta, reversa; nunca va a ocurrir que se cambie a la velocidad segunda con dos cuartos o tercera con un quinto. En este caso, se tiene una cantidad finita de valores dados y cuando se está en uno de ellos para cambiar a otro se hace de forma abrupta; es decir, no es posible hacer un cambio gradual ni pausado. Lo mismo ocurre con las matemáticas, pues se puede dividir en dos grandes ramas: las continuas y las discretas.