Gustavo Adolfo Bécquer era un alma inquieta, un ser un tanto perturbado que no podía dejar de escribir todas aquellas ideas que brotaban de su mente. Angustiado y a su vez fascinado por la idea de la muerte, esta se manifiesta lo mismo en sus rimas que en sus leyendas y narraciones. Fue un poeta que no pudo desligarse de su obra; Él esta ahí presente en cada palabra. Esta es una obra clásica del romanticismo español, que retrata la belleza profunda de una manera fascinante, destacando la deliciosa descripción de Sevilla y Toledo, lugares que impregnan el ánimo del escritor en forma por demás significativa. Fue Bécquer un autor que alcanzó la fama póstuma, ya que en sus versos y prosas logró plasmar todo el espíritu de un pueblo.