Si alguien te dice que vio a los Rolling Stones en su primera gira por Estados Unidos, harías bien en pensar que es una persona muy afortunada o que está confundida. La gira de los Stones en junio de 1964 consistió en unas pocas presentaciones, a las cuales asistieron solo unos cuantos fanáticos. En menos de un año, gracias a que sus giras se fueron alargando y grabaron muchos de sus éxitos allí, Estados Unidos se convirtió en su segundo hogar. En 1969 la gran gira de los Stones por este país culminó con su presentación en el festival de Altamont, que fue todo un fiasco, y en el cual pudo actuar, en vez de ellos, una banda de menor categoría. A pesar de ser un desastre, la banda ya estaba en camino de convertirse en una máquina de giras, como lo demuestran sus fastuosos espectáculos de la década de 1970. Desde entonces, sus cada vez más extensas giras por Estados Unidos se han vuelto proyectos a escala industrial. Hoy en día, la mejor banda de rock 'n' roll del mundo cuenta con el récord del mayor número de asistentes a conciertos, en total, que cualquier otra banda de la historia.