MANUEL M. PONCE (1882-1948) En la producción musical de Manuel M. Ponce destacan dos periodos: uno romántico, que viene a cerrar el capítulo de los compositores que le precedieron, y otro moderno que, si bien se manifiesta esporádicamente desde la primera década del siglo xx, se consolida a partir de su estancia parisina en 1925. Si comparamos estas dos épocas, observamos notorios contrastes armónicos, tímbricos y formales. Dentro del primer estilo cabe distinguir, a su vez, aquellas obras pertenecientes al romanticismo universal de otras, en cambio, inspiradas en la música popular de su país. De hecho, Ponce es el fundador del nacionalismo musical mexicano. Armonizó cantos del pueblo, introdujo dichas melodías en pequeñas y grandes formas, y creó motivos propios con el auténtico sabor de los elementos folclóricos locales. De 1915 a 1917, fija su residencia en La Habana y asimila las características de la música cubana, sugiriéndolas en las obras allí concebidas. Transcurre una etapa en París, de 1925 a 1932, y a partir de entonces prevalece un estilo modernista en sus nuevas creaciones. Introduce, además, el nacionalismo indígena, creando con ello un ambiente de música autóctona del México prehispánico. En 1933 vuelve a radicar en su patria y, posteriormente, escribe sus obras de madurez. Dos meses antes de fallecer se le otorga el "Premio Nacional de Artes y Ciencias", siendo Ponce el primer músico en recibir dicha distinción. Paolo Mello