Este libro reúne alguna de las aportaciones más recientes de Paolo Grossi. Prioritariamente destinado a los estudiantes de ciencias jurídicas, pero también a los ajenos al mundo del derecho, en ellas aparece quintaesenciado el fundamento de su pensamiento jurídico. A partir de un sintético recorrido histórico que arranca en sus orígenes medievales, el autor repasa los hechos y las teorías que dieron lugar al nacimiento del derecho moderno, analizando sus bases y consecuencias. Grossi se detiene en particular en el análisis de las crisis del Estado y la ley que se manifiestan a finales del siglo XIX y principios del XX, y en las respuestas a las mismas, las cuales, en el plano jurídico, hacen, en su opinión, del Novecientos una época «de transición». En un nuevo tiempo de crisis, que afecta en particular a Occidente, el libro presenta su conocida teoría de la centralidad de los juristas y de la recuperación de la sociedad como la auténtica forjadora del derecho como una plausible alternativa en la "era de la globalización".