La guerra mesoamericana de 1519-1521 tuvo muchos ganadores y muchos perdedores; igual que la invasión mexicana de Centroamérica y la dura y larga conquista del septentrión novohispano. No fueron los castellanos los únicos que contaron su versión de aquellos hechos de armas; también lo hicieron tlaxcaltecas, quauhquecholtecas, otomíes, purépechas e incluso tlatelolcas y mexicas, quienes en un principio fueron derrotados pero una vez cristianizados e incorporados a la soberanía del rey católico, se sumaron a la expansión novohispana para convertirse en conquistadores de Guatemala, Perú, Filipinas o Florida. Este libro coral pretende poner en primera fila la visión de las naciones indígenas que, aliadas a la Corona, batallaron durante todo el siglo XVI para consolidar de raíz al nuevo reino cristiano de la Nueva España, y así contribuir a saldar la deuda historiográfica con estos pueblos cuya visión de la Conquista lleva tantos siglos velada a la mirada de los lectores.