En nuestro país, el suicidio representa un problema de salud pública que cada vez tiene mayor incidencia entre la juventud. Este fenómeno social debe ser atendido por todos los sectores de la sociedad, gobierno, organizaciones no gubernamentales (ONGs), sector privado y público en general, mediante programas de higiene mental accesibles a todos los niveles socioeconómicos y contextos urbanos y suburbanos, así como a las diferentes subculturas que existen en la comunidad. Las autoras de este libro propone una estrategia psicoeducativa para la prevención del suicidio en los jóvenes, a través del taller "Salvando vidas", cuyo objetivo es lograr la reducción del mismo, capacitándolos como guardianes informados con la misión de detectar comportamientos suicidas y abordar en forma adecuada a las personas en riesgo de suicidio. Entre los objetivos de esta estrategia están el desarrollo de programas de entrenamiento para la prevención del suicidio, dirigidos a profesionales de la salud, policía, educadores, clero, etc., así como contar con el apoyo, por una parte, de las autoridades para restringir el acceso de los suicidas en potencia a los recursos para conseguir sus fines, y, por otra parte, de los medios de comunicación para que los temas relacionados con el suicidio sean abordados con prudencia.