Si los testimonios que se conservan en náhuatl constituyen una especie de relato épico de la que fue enorme tragedia para el hombre indígena, hay también otro testimonio en español, más dramático aún que las Cartas de relación de Cortés o los otros pequeños testimonios que se han mencionado. En tanto que el capellán del conquistador, el humanista Francisco López de Gómara, pergeñó una narrativa acerca de la conquista, según lo que le comunicó don Hernando, existe y se conserva otro relato que por su fuerza narrativa rivaliza con los textos indígenas. Es el que salió de la pluma de otro conquistador, Bernal Díaz del Castillo. El acontecer de la conquista quedó reflejado así en dos espejos en los que de manera fulgurante se manifestaron los hechos. Bernal se ocupó en la elaboración de su obra a lo largo de más de treinta años. Su Historia verdadera de la conquista de la Nueva España, al lado de la Visión de los vencidos, son algo así como doble acta de nacimiento del pueblo que se fue formando corno consecuencia de esa conquista. En esta introducción nos ocuparemos en primer lugar de los manuscritos en que ella a llegado hasta nosotros. Nos acercaremos luego a la persona de don Bernal, apoyados en lo que él mismo dejó escrito y aduciendo otros antiguos testimonios. Complemento de lo anterior será mostrar qué motivos tuvo él para escribir su Historia. Y como asunto en cierto modo central nos ocuparemos en forma sumaria del rico contenido de dicha obra.